El concepto de competitividad ha sido tratado por muchos intelectuales de las ciencias económicas y administrativas remontándose a los estudios realizados por David Ricardo (1772-1823) en su obra “The Principles of political economy and taxation” publicada en 1817, en la que propone un modelo de comercio internacional que se conoce como el modelo Ricardiano en el cual postula lo siguiente: “El comercio entre dos países puede beneficiar a ambos países si cada país exporta los bienes en los que dispone de ventaja comparativa”, entendiéndose de este concepto que “un país tiene ventaja comparativa en la producción de un bien si el coste de oportunidad en la producción de este bien en términos de otros bienes es inferior en este país de lo que lo es en otros países”.