A pesar de los grandes cambios ocurridos en la ciudad en los últimos veinte años, el sistema de transporte colectivo conserva la estructura que lo definió en los años cincuenta. Este cada día es mas fuerte, se extiende e involucra nuevos actores y sobre todo se consolida como la única alternativa de transporte urbano para la mayor parte de la población cartagenera. Los operadores encargados de los servicios conservan características de tipo propietario - chofer – artesano, o sea, existe una atomización de la propiedad de la flota operativa. Existe amplia cobertura, a unos lugares llegan pocas rutas y a otros mas de los que se requieren para atender dichos sectores. La ciudad a cambiado su polo de desarrollo y su función comercial se ha desplazado hacia otras zonas, sin embargo, la mayoría de las rutas siguen pasando por el centro histórico, causando embotellamientos y desatendiendo otros sectores.