Resumen
Hoy en día, la creciente competencia obliga a las empresas a satisfacer las necesidades de los
clientes de forma ágil con el fin de conservar su puesto en el mercado. Es por esto que existe una
gran variedad de productos que pueden ser fabricados dentro de una misma industria con el fin de
satisfacer la demanda; esto es posible gracias a los sistemas de manufactura flexibles (FMS, por
sus siglas en inglés) que son consecuencia de muchas de las innovaciones tecnológicas generadas a
través de los últimos años.
Cuando a un taller llega una serie de trabajos a realizar, se procede a efectuar la programación de
dichos trabajos teniendo en cuenta las máquinas, los materiales y los operadores disponibles para
realizar los trabajos, es decir, se realiza una asignación de recursos para la fabricación de bienes o
prestación de servicios, conociéndose este proceso como Programación de Producción.
La programación es una tarea compleja tanto en la teoría como en la práctica. Teóricamente, los
problemas de programación, que consisten en buscar un programa óptimo sujeto a un limitado
número de restricciones, sufren de complejidad excesiva y son en su mayoría NP-Hard, categoría
en la que se ubican aquellos problemas que para su resolución no son suficientes tiempos
computacionales polinomiales, son no determinísticos y que no se pueden resolver mediante el
uso de algoritmos clásicos, se necesita la utilización de métodos heurísticos (Garey, M. and
Johnson, D., 1976).