Abstract
Desde el año 2014, centenares de niñas y mujeres adolescentes de un municipio rural de Colombia desarrollaron una enfermedad de etiología desconocida que atribuyeron a una campaña de vacunación escolar contra el Virus del Papiloma Humano (VPH). Las autoridades sanitarias, tras descartar una relación de causalidad entre la vacuna y los síntomas, trataron el caso como una sugestión colectiva, pero esta respuesta fue rechazada por las afectadas y sus familiares. El caso saltó a los medios de comunicación, se desencadenó una controversia médica y legal, y la cobertura de vacunación con este fármaco descendió drásticamente en todo el país. Este artículo presenta los resultados parciales de una investigación narrativa producida a partir de una etnografía audiovisual llevada a cabo sobre terreno con la comunidad afectada entre 2015 y 2021. Los datos recogidos han sido objeto de un análisis cualitativo-inductivo basado en el procedimiento de la teoría fundamentada.
Se concluye que estamos ante un problema de salud pública singular vinculado a la aplicación de una vacuna que evidencia cómo una intervención de salud pública dirigida a las mujeres se convirtió, paradójicamente, en un ejemplo de violencia institucional y de género.
Since 2014, hundreds of adolescent girls and young women in a rural municipality in Colombia have developed a disease of
unknown etiology that they attribute to a school vaccination campaign against the Human Papilloma Virus (HPV). The health
authorities, after ruling out a causal relationship between the vaccine and the symptoms, treated the case as a collective
suggestion, but this response was rejected by those affected and their families. The case jumped to the media, triggered a
medical and legal controversy, and vaccination coverage with this drug fell drastically throughout the country. This article
presents the partial results of a narrative research produced from an audiovisual ethnography carried out on the ground with
the affected community between 2015 and 2021. The data collected has been the subject of a qualitative-inductive analysis
based on the procedure of the Grounded Theory. It is concluded that we are facing a unique public health problem linked to
the application of a vaccine that shows how a public health intervention directed at women became, paradoxically, an example
of institutional and gender violence