Abstract
Con el aumento de la necesidad de energía eléctrica, se han venido presentando
soluciones con el fin de suplir dicha demanda y al mismo tiempo para mejorar
tanto las maneras de transmitir, al igual que la calidad con la que la energía llega
al usuario final.
Generalmente las medidas que se consideran para optar por una solución u otra
van ligadas directamente con la necesidad y del sistema que se desea
implementar. La principal problemática se ha centrado básicamente en los
sistemas de distribución, subtransmisión y transmisión en altos niveles de tensión.
Cuando la demanda local o total de una región aumenta, en particular para las que
ya han sido establecidos e implementados sistemas tanto de generación como de
transmisión, surgen varios inconvenientes que hay que resolver de alguna forma,
por ejemplo, está el problema de la regulación de tensión y la calidad de la
energía. Para sobrellevar este problema se ha tendido por aumentar los niveles de
tensión con los cuales se transmite y/o distribuye la energía, pero paralelamente a
esto surgen una serie de dificultades que complican de cierta forma la aplicación
de este recurso